Dentro de la prosa narrativa de Palacio, podemos encontrar largas interjecciones típicas de los narradores editoriales: Borges, Proust, Kerouack... A mi parecer esas interrupciones por parte del narrador se caracterizan por ser un tanto sarcásticas y poseedoras de un humor negro único. Por ejemplo en la novela de "un hombre muerto a punta pies", es una gran parodia de la novela policial: "con todo, miedoso y desalentado, encendí mi pipa.-esto es esencial, muy esencial", una referencia clara de Conan Doyle. Asimismo emprende un ejercicio burlon hacia la mitología clásica: "Davne y Apolo". En fin, Palacio busca marginarse de la sociedad aparentemente normal al ridicudizarla y favorecer a aquellos "anormales".
Palacio es un autor vanguardista, ya que trae algo nuevo en comparación a los autores contemporáneos ecuatorianos, con una nueva forma de escribir, de transfigurar sus personajes, y la forma en la que redacta nos demuestra una sociedad de los años 30, burlándose de ella. Con todo esto podemos decir que no solo es de los mejores, sino el mejor escritor ecuatoriano, como nos lo anticipó nuestro profesor de literatura al recomendar el libro.
Ronny Guarderas Luna
Sexto "C"
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