lunes, 5 de mayo de 2008

Mi trip a través del Capitán Nirvana

Devorando página tras página de este libro, descubro la fantasía contenida en la mente de un hombre genial. El hecho de pensar en un gato parlante con problemas de identidad (“no sé si soy gato o un tomate”) a simple vista merece un juicio de ridiculez; pero no, recorriendo cada palabra veo algo fascinante, es como si cada palabra me recordara una canción de The Cure, tarareo boys dont cry y me parece que poseyeran la misma armonía. Una lírica genial, aunque carente de signos de puntuación en ciertos episodios, lo que le da la vaguedad necesaria como para sentirse contemplando a Amarilla en el Bar del Capitán Nirvana danzando a través del humo azul de cigarrillos Pielroja, viéndose deformada a través del cristal de un vaso whisky, un scotch que rápidamente es absorbido y un aire a LSD que se une al fondo musical llegando a ti como una imagen digna de un de Escher.



Ronny Guarderas Luna
Sexto "C"

No hay comentarios: