lunes, 19 de mayo de 2008

"De cuando en cuando me ocurre vomitar un conejito"....



Indudablemente surrealista, el cuento de Cortazar nos muestra una ralidad ficticia, tal como se presentan las mayorias de sus obras. Un cuento ademas de tener calidad, es entretenido; pero lo que mas resalta, en mi opinion, es la sensacion de aceptacion que siente el lector frente a la realidad que propone Cortazar. Vomitar conejos es imposible!!!, tan simple como eso, tan simple que nos asimila facilmente, y es esa la magia del autor. Carta a una Señorita en París es un cuento bellisimo donde la realidad de la obra es tratada con tanta sutileza y con tanto desden que el hecho de vomitar conejos es algo tan cotidiano como caminar. Megabloggers ha publicado los links de algunos cuentos de Cortazar, entre ellos este. Es recomendable, puesto que es un tanto extraño y cotidiano al mismo tiempo, un cuento obscuro y tierno, un cuento formidable donde se perciben dos realidades anexas a la nuestra.


Entre otras maravillas, el detalle del cuento me conmovio, me asqueo, me brindo sensaciones y me parecio brillante. El detalle, es otro de los recursos que usa el autor para meternos la realidad en la cabeza. Es un detalle tan preciso, tan pensado que no solo brinda imagenes sino sensaciones; dibuja un panorama en donde tu llegas a entender que es posible vomitar un conejo. Sientes el vomito, sientes y miras al conejo que nace de tu interior; pero mi descripcion es un detalle miserable junto a Cortazar, asi que les dejo una pieza de la lectura para que se piquen, y una imagen finisima que encontre.
Cuando siento que voy a vomitar un conejito me pongo dos dedos en la boca como una pinza abierta, y espero a sentir en la garganta la pelusa tibia que sube como una efervescencia de sal de frutas. Todo es veloz e higiénico, transcurre en un brevísimo instante...
Santiago Granda
Sexto C

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